De la academia a las calles: Un día con la Policía Metropolitana de Las Vegas
LAS VEGAS, NV (Vegas Hoy) - Una vez que un recluta se gradúa y se une oficialmente al departamento de la Policía Metropolitana de Las Vegas, el entrenamiento no termina. El desafío real empieza cuando las paredes del salón desaparecen.
Después de meses en el salón, es en las calles en donde empieza a contar todo. Los nuevos agentes de la Policía Metropolitana de Las Vegas se gradúan de la academia y luego se presentan para patrullar y aprender cómo es realmente el trabajo fuera de un entorno controlado.
“Lo que aprenden en la academia se refleja en lo que se encuentran aquí, en la calle. Esa es la base, los cimientos”, dijo el sargento Michael Méndez.
Cada día en la estación de la policía empieza con una reunión informativa. Los supervisores hablan de las tendencias delincuenciales y de las prioridades del turno.
A partir de ahí, son horas de llamadas, algunas urgentes, otras de rutina.
En el asiento del conductor, la agente de policía Ashley Fesler nos cuenta que cada parada es una oportunidad de convertir las lecciones de la academia en memoria muscular.
“Estamos aquí para hacer cumplir la ley y eso es exactamente lo que acabamos de hacer”, dijo Fesler.
A mitad de un pase con la policía, un conductor se saltó un semáforo en rojo y Fesler lo detuvo. Cuando comprobó la matrícula, la detención se convirtió en algo más.
“Se descubrió que el conductor tenía dos órdenes de detención pendientes”, dijo Fesler. “Es una intersección importante. Está llena de vehículos y peatones. Está llena de familias cruzando la calle. Por lo tanto, cuando alguien se salta un semáforo en rojo, la posibilidad de que atropelle a un peatón u otro vehículo es extremadamente alta”.
El hombre fue esposado y llevado a la cárcel. Para Fesler, es un ejemplo clásico que comparte con los nuevos agentes: la decisión de actuar ante una infracción de tráfico puede revelar un problema mayor.
Más tarde, durante el turno, Fesler vio a un carro que iba a alta velocidad y aceleró el motor.
“Le expliqué el motivo de la parada, pero lo negó. Por desgracia, aun así, fue multado por la infracción”, dijo Fesler.
La Policía Metropolitana siempre está buscando reclutas. Los solicitantes deben tener 21 años o más, licencia de conducir y aprobar una verificación de antecedentes.
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